A ti, que por vivir en una casa unifamiliar te crees que eres el centro del universo. A ti, que por conducir una furgoneta de lunes a viernes y un audi los fines de semana piensas que eres un ser superior. A ti, que solucionas los problemas a gritos, en vez de civilizadamente. A ti, que debes de tener un coeficiente intelectual similar o inferior al del hombre de Atapuerca (y seguro que ni sabes con quién te estoy comparando). A ti, que criticas la falta de educación de los demás y tienes los arrojos de encararte y gritarle a una madre con un hijo de meses en brazos... A ti, que no eres ejemplo de nada y vas dando lecciones. A ti, que el concepto de vecindad te debe de sonar a sánscrito, igual que el de civismo y otros tantos valores necesarios para la convivencia en sociedad. A ti, sólo a ti, va dedicado este post. Y tranquilo, que la próxima vez que tu furgoneta se cruce en mi camino, desapareceré dejándote la vía libre...porque eres la clase de persona en la que no espero convertirme nunca y tu sola presencia hace que sienta náuseas.
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AutorHe vivido ya 8 Mundiales de Fútbol, 7 Juegos Olímpicos, 5 giras de Bruce Springsteen, 2 finales de la UEFA del Espanyol y una boda de una hermana. Archivos
July 2009
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